VIDEOS: Dos aviones militares estadounidenses aterrizaron en Guatemala con los primeros migrantes deportados

Dos aviones militares de Estados Unidos con decenas de migrantes expulsados llegaron a Guatemala este viernes, según informaron las autoridades, sin especificar si formaban parte de la operación de deportación lanzada por el presidente Donald Trump.

Un total de 79 guatemaltecos —48 hombres y 31 mujeres— viajaban en el primer vuelo, que aterrizó alrededor de la medianoche, según el instituto de migración del país centroamericano.

El segundo avión, con un número no especificado de migrantes a bordo, llegó la mañana del viernes.

La Casa Blanca anunció el jueves por la noche que «538 criminales inmigrantes ilegales» habían sido arrestados y cientos deportados en aviones militares, asegurando que “la mayor operación masiva de deportación en la historia está en marcha”.

El gobierno guatemalteco no confirmó si alguno de esos migrantes formaba parte de los deportados que llegaron el viernes.

“Estos son vuelos que ocurrieron después de que Trump asumiera el cargo”, dijo a AFP un funcionario de la oficina del vicepresidente de Guatemala.

Una fuente del Pentágono indicó a AFP que “durante la noche, dos aviones del Departamento de Defensa (DOD) realizaron vuelos de repatriación desde Estados Unidos a Guatemala”.

La madrugada del viernes, la Casa Blanca publicó una imagen en X de hombres con grilletes siendo conducidos hacia un avión militar, con la leyenda: “Han comenzado los vuelos de deportación”.

Trump declaró a los periodistas que los vuelos tenían como objetivo sacar a “los malos, los criminales peligrosos”.

“Asesinos, personas que han sido tan malas como cualquiera que hayas visto”, dijo.

Los vuelos de deportación se llevaron a cabo regularmente durante el mandato de su predecesor Joe Biden, cuya administración deportó a unas 270,000 personas en el año fiscal 2023, más que en cualquier año del primer mandato de Trump.

Los deportados del viernes fueron trasladados a un centro de recepción en una base de la fuerza aérea en la capital de Guatemala, lejos de los medios de comunicación.

Trump prometió mano dura contra la inmigración ilegal durante su campaña electoral y comenzó su segundo mandato con una serie de acciones ejecutivas destinadas a reformar las entradas a Estados Unidos.

En su primer día en el cargo, firmó órdenes declarando una “emergencia nacional” en la frontera sur y anunció el despliegue de más tropas en el área, mientras prometía deportar a los “extranjeros criminales”.

Su administración también informó que restablecería la política de “Permanecer en México”, bajo la cual las personas que soliciten ingresar a Estados Unidos desde México deben permanecer allí hasta que se decida sobre su solicitud.

Asimismo, la Casa Blanca detuvo un programa de asilo para personas que huyen de regímenes autoritarios en América Central y del Sur, dejando a miles varados en el lado mexicano de la frontera.